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«Mi abuelo Isaac publicó este librito en 1925. Por entonces tenía casi 30 años y vivía con su mujer y dos hijas en Maestu, pueblo de la Montaña Alavesa del que era médico titular. Mi abuelo se había criado en una familia tradicionalista de rosario y misa diaria, pero en torno a 1921 entró en contacto con la CNT, y en 1923 ya era un anarquista convencido. Con este folleto pretendió divulgar los beneficios del ejercicio al aire libre en la línea del Naturismo, que propugnaba una relación armónica del hombre con la naturaleza bajo este hermoso lema: "Buscar la verdad, practicar el bien y contemplar la belleza"». ALBERTO JIMÉNEZ PUENTE
La biografía de Isaac Puente (1896-1936) recorre la senda de las vidas singulares -atravesadas por el dolor, pero también por el goce y el apasionamiento- que durante el pasado siglo transitaran tantos y tantos anarquistas marcados por la guerra y la experiencia indeleble de la Revolución Social.
Médico rural, naturista, deportista, anarcosindicalista, teórico anarquista, revolucionario? Sus artículos y colaboraciones aparecieron de forma habitual en revistas como Generación Consciente, Orto, Estudios o Iniciales, fundamentales para comprender el vastísimo acervo cultural del movimiento libertario de la época. Su propuesta de lo que debía ser el Comunismo Libertario, publicada en 1933, inspiró el acuerdo que la CNT tomara a propósito de las finalidades de su lucha en el Congreso de Zaragoza de 1936.
Nacido en el contexto de una familia alavesa conservadora, su militancia anarquista le llevó a pasar por la cárcel en varias ocasiones. El 1 de septiembre de 1936, contando solo con 40 años, fue fusilado por los sublevados franquistas que controlaban Álava.
Su impronta, todavía vigente en la militancia ácrata, se evidencia por ejemplo en la labor desarrollada por la Asociación Isaac Puente, entidad vitoriana responsable de la edición de la Enciclopedia histórica del anarquismo ibérico de Miguel Íñiguez.
