Con la guerra civil española como telón de fondo, esta novela gira en torno al recorrido vital de su narrador, un ex combatiente de las Brigadas Internacionales, Pierre Dupastre, y de las relaciones que éste mantiene con un frío periodista, Drameille, y un capellán un tanto herético, el padre Luis Carranza. Dupastre, que ha abandonado la militancia política y ha decidido ponerse a escribir una novela bajo seudónimo, puesto que está en la clandestinidad, recibe de manos de Drameille unos documentos que demuestran las traiciones de altos mandos comunistas durante el periodo de entre guerras, para que sea él quien los haga públicos. La novela combina magistralmente la búsqueda religiosa, que toma forma en las aspiraciones del profético padre Carranza y de sus pupilos; la acción política, a través de los diferentes posicionamientos de sus personajes, que van desde la no acción hasta el terrorismo activo, y la pasión erótica, encarnada en las dos mujeres que marcan el camino de Dupastre.