En el prólogo a esta Prosa completa de la mítica poeta argentina Alejandra Pizarnik, Ana Nuño nos habla de este libro imprescindible y esperadísimo en los siguientes términos: El interés que presenta esta edición, respecto del ominoso imperativo de la novedad editorial, es triple: ofrece una ordenación cronológica de un material que en su momento fue recogido en volumen, tanto en Argentina como en España; rescata textos, sobre todo mas no exclusivamente, de crítica literaria d e la autora, publicadas originalmente en revistas literarias de difícil consulta, y da a leer este conjunto como un todo, lo que permite subrayar la coherencia y correspondencias múltiples entre prosa de creación y prosa ensayística, por un lado, y, por otro, el conjunto de la prosa y la obra poética. Conviene destacar dos aspectos de la prosa de Pizarnik. Los relatos, en primer lugar, cuajados de motivos y figuras recurrentes enla obra poética: la seducción y la nostalgia imposibles, la tentación del silencio, la escritura concebida como espacio ceremonial donde se exaltan la vida, la libertad y la muerte, la infancia y sus espejismos, los espejos y el doble amenazador. Importa menos, en este sentido, la extensión de los relatos que la intensa concentración en ellos de un trabajo de escritura que busca exaltar los poderes del lenguaje. Este es (y no la muerte o la locura o el suicidio) el gran motor de la obra de Pizarnik.
AUTOR/A
PIZARNIK, ALEJANDRA
Alejandra Pizarnik nació en Buenos Aires y murió en esa misma ciudad en 1972, a los treinta y seis años. Poeta, narradora y ensayista, su obra ha ido creciendo con el tiempo hasta adquirir la categoría de clásico indiscutible.