Pedro Garfias (1901-1967) es uno de los escritores más fascinantes y, a la vez, menos conocidos de la Generación poética del 27. Nacido en Salamanca, vivió su juventud en las provincias de Sevilla y de Córdoba, y se matriculó en Derecho en la capital andaluza, para dedicarse luego en cuerpo y alma a la literatura y a la lucha política. Participante activo en los movimientos de vanguardia poética, firmó junto a otros compañeros en 1919 “Un manifiesto literario”, publicado en la revista sevillana Grecia y que sería la presentación en sociedad del ultraísmo literario español. Amigo de Lorca, Alberti, Moreno Villa, Buñuel en la Residencia de Estudiantes, y de Neruda, Borges, Cansinos-Assens y Huidobro, a quienes los jóvenes del Ultra tienen por maestros. A comienzos de 1939 abandona España e inicia un largo exilio que lo llevará a Francia, Inglaterra y México, país este último en el que vivirá 28 años y donde fallecerá a los 66 años, en 1967. Durante su exilio británico, “en días aciagos” y “a raíz de la pérdida de España”, escribirá uno de los poemarios más excelsos y conmovedores de la literatura española, el más bello del exilio español según Dámaso Alonso: Primavera en Eaton Hastings, que sería publicado poco después, en 1941, en México. Otras obras de su época española son Alas del sur (1926), Poesías de la Guerra (1937) y Héroes del Sur (1938). De su etapa mexicana resaltan Poesía de la guerra española (1941), Elegía a la presa de Dnieprostroi (1943), De Soledad y otros pesares (1948), Viejos y nuevos Poemas (1951) y su postrer libro Río de aguas amargas (1953).