Palabra que encarna y se desgarra, a la vez origen y cuerpo expulsado, raíz, dolor, desierto, agua y libertad.
La poesía de Carla Aparicio sale a la luz enraizada profundamente en un territorio inconfundible, propio. Madreselva constituye su primera germinación, pero ya en este mismo suelo se intuyen floraciones futuras. Despunta una palabra que se rasga, que a cada instante se rompe para ofrecer fruto, madurar, volverse tierra. Una poesía que se engendra y extingue para seguir naciendo.
Creció escurridiza, salvaje,
fuera del tajo de mis ojos
hasta arder sobre mí como
la mansa llovizna de una falsa epifanía.
Dar vuelta y ver vida nueva, ajena,
engullendo el núcleo que nunca más
Olga Muñoz Carrasco
Carla Aparicio Gallardo (Ciudad de Panamá, República de Panamá, 1992) es graduada en Psicología por la Universidad de Saint Louis ? Madrid, donde también realizó estudios de filosofía y literatura inglesa, además de cursar un posgrado en lengua y literatura hispánicas. Creció en Soná, un pueblo de la provincia panameña de Veraguas, y con 17 años se mudó a Nueva York. Vive en Madrid desde 2017 y compagina su trabajo en el área de la psicología con su faceta como escritora y su pasión por el estudio y la investigación. Madreselva es su primer libro.
