Persentación del libro Fucked Feminist Fans (Dos Bigotes, 2024) Con Leyre Marinas y Rocío Saiz.
Fucked Feminist Fans hace referencia al momento en el que te topas por primera vez con los feminismos, te das cuenta de que eres feminista y abres los ojos de lo cabreada que estás. También podría ser la etiqueta que algún crítico cultural utilizaría para hablar, entre otras, de las grupis de los sesenta y setenta; de las Riot Grrrls y las «Angry Young Women» de los noventa; de las Spice Girls y del resto de representantes del Girl Power; de Madonna, Britney Spears, Christina Aguilera, Lady Gaga o Beyoncé —y de sus actuaciones en los MTV Video Music Awards—; de las Pussy Riot, o de Courtney Love, que en 2005 ya advirtió de las agresiones sexuales de Harvey Weinstein en la industria del cine.
En Fucked Feminist Fans. Los orígenes del #MeToo desde la cultura pop musical, Leyre Marinas profundiza en las conexiones que han mantenido durante los últimos treinta años la música, los movimientos feministas y el sexismo divulgado por los medios de comunicación. Un diálogo en el que juegan un papel fundamental la tercera y la cuarta ola feministas y el estallido del #MeToo en 2017 y sus derivadas internacionales, verdadero punto de no retorno en lo que a la concienciación pública del acoso y los abusos se refiere. Quien lea este libro se habrá sentido fucked alguna vez y también se considerará feminista y habrá sido o es fan de algunas de las personas que aparecen en sus páginas.
Leyre Marinas (Alacant, 1993) es precaria de nacimiento, publicista de formación y doctora en periodismo. Lee, escribe e investiga sobre lo que en el instituto le decían que no servía para nada: cultura pop, comunicación, feminismos y activismos LGTBIQ+. En 2018 ganó el premio de la Fundación SGAE a la realización de tesis doctorales. También ha ejercido como profesora de comunicación, periodismo y publicidad en diferentes cursos y universidades. En la actualidad sigue sin entender por qué hay que trabajar. En 2024 publica en
Dos Bigotes su primer ensayo, Fucked Feminist Fans. Los orígenes del #MeToo desde la cultura pop musical.