Para envío
Paul Auster comenzó a escribir La invención de la soledad tras la muerte repentina de su padre. Compuesto por dos textos, en «Retrato de un hombre invisible» homenajeaba a la figura paterna y profundizaba en un dramático suceso del pasado familiar que marcó para siempre a su progenitor; sobre «Libro de la Memoria», en el que su perspectiva cambiaba de hijo a padre, Enrique Vila-Matas escribió que es «un bello texto que contiene el germen de toda la obra austeriana».
Con su debut, Auster obtuvo un reconocimiento unánime por su innovadora mezcla de introspección, reflexión y biografía con la que inauguraba una carrera literaria única. De una rara intensidad, íntima y universal a la vez, entre los recuerdos y sentimientos que este libro recoge se vislumbran ya algunas de las obsesiones perennes del autor, como la soledad, el lenguaje o el azar.