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El libro del profesor Sergio Antonio Mosquera (2017) llega en un momento oportuno y lleno de simbolismo: Coincide con la Declaración del Decenio Internacional de los Afrodescendientes (2015-2024) por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Por otra parte, se presenta en un campo donde la mayoría de los estudios críticos y teóricos sobre la experiencia negra, africana y transafricana, en las Américas en general, y en Colombia, en particular, se han hecho, sin quitarle méritos a sus autores, desde una perspectiva y un lugar de enunciación externo a la comunidad afectada, histórica y emocionalmente. Así mismo, el trabajo de Sergio Antonio Mosquera es importante, en tanto y en cuanto, integra un proceso de emergencia de una generación de intelectuales y pensadores negros y transafricanos, cuya mirada revisionista se inicia a mediados del siglo pasado.
El libro de Sergio Antonio Mosquera es un estudio riguroso, meticuloso e innovador. Propone una reflexión crítica y novedosa desde una perspectiva histórica-psicológica, es decir afectiva e interna. Además ofrece una comprensión intimista del impacto de lo que el congoleño Pius Ngandu Nkasama llama une douleur commune (un dolor común) sobre la experiencia del negroafricano y sus descendientes en las Américas. Es precisamente esa experiencia del dolor físico, emocional y mental, la que unifica y homogeniza la experiencia de lo que Mosquera describe como La trata negrera y la esclavización del negro en las Américas, desde Canadá hasta Tierra de Fuego.
