Amores imposibles, escenas sexuales sui generis, palidez cadavérica, barcos fantasma, el hijo de Dios de resaca en París, composiciones psicotrópicas, alguna que otra calada de belladona? y muerte. Sobre todo mucha muerte. Los arrecifes de coral te sumerge en un mundo de ficción delirante, capaz de relatarte una felación con un cultismo propio del mismo Góngora. Quiroga propone en esta obra de juventud una crítica feroz al canon, a lo políticamente correcto, proyectando un canto a lo no normativo que excede todos los límites que se puedan concebir. ¿Te atreves?
«Era un hombre que parecía como hecho de leña», Jorge Luis Borges.
LOS ARRECIFES DE CORAL
AUTOR/A
QUIROGA FORTEZA, HORACIO
(1878-1937). Está valorado como uno de los mejores cultivadores del cuento en castellano, aunque su carrera literaria comenzó con un poemario modernista (Los arrecifes de coral, 1901). Su vida estuvo llena de episodios dramáticos y problemas económicos y matrimoniales, agravados por las drogas y la amenaza del suicidio, que finalmente consumó, como otros miembros de su familia. Ese mundo personal turbulento y la influencia de Edgar Allan Poe dejan poso en su narrativa, llena de alucinación, violencia y delirio. Su obra recorre a menudo la frontera entre la naturaleza y la civilización, entre lo racional y los instintos animales latentes en el hombre. Su abundante producción incluye las novelas Historia de un amor turbio (1908) y Pasado amor (1929), casi dos centenares de cuentos y las seis novelas cortas reunidas en este volumen. Entre sus relatos, destacan los recogidos en los libros Cuentos de amor de locura y de muerte (1917, publicado por Menoscuarto en 2004) y Cuentos de la selva (1918), volumen al que se suelen incorporar Anaconda (1921) y El regreso de Anaconda (1926), relatos editados por Menoscuarto en 2009.