En los años previos a la Segunda Guerra Mundial, un gran número de personas de ideología comunista volvió los ojos hacia la Unión Soviética, baluarte de lo que amaban y defendían. Pero una vez allí, a menudo fueron acusados de espionaje o contrarrevolución y enviados a los campos de trabajo de Siberia. Es el caso de Margarete Buber-Neumann, esposa de un miembro del Partido Comunista alemán que huyó a la URSS, donde en 1937 fue arrestado y donde su mujer le vio por última vez. Un año más tarde comenzaría el calvario de la propia Margerete, condenada a cinco años en campos de trabajo. De Siberia fue trasladada al campo de concentración nazi de Ravensbr?ck, ya en su propia tierra, pero no por eso menos cruel ni humillante.
AUTOR/A
BUBER-NEUMANN, MARGARETE
Nació en Berlín en 1901. Militante comu-nista durante su juventud, se casó con Heinz Neumann, directivo del KPD (Par-tido Comunista Alemán). Tras la llegada de Hitler al poder, en 1933, los dos emigraron a la URSS, hacia cuyo sistema experimen-taron muy pronto un profundo desacuerdo que fue causa de su detención en 1937. Mientras su marido «desaparecía», presu-miblemente ejecutado, Margarete Buber fue internada en un campo de concentra-ción en Siberia. En 1940, tras el pacto entre Hitler y Stalin, fue entregada a la Gestapo y recluida en el campo de concen-tración para mujeres de Ravensbrück. Allí conoció a Milena, cuya amistad marcaría profundamente su vida y determinaría, después de su liberación en 1945, su vocación de dar a conocer a la opinión pública su dramática experiencia como doble víctima del totalitarismo, experiencia volcada en libros como Deportada en Siberia o En las cárceles de Stalin y Hitler.