Ésta es una novela sobre la condición femenina. Adrián, escritor nacido en Lot, evoca la vida de su madre muerta mientras se suceden los funerales y el entierro. También se alza ante nuestros ojos la fertilidad dolorida de una época, el siglo XX español. Aunque lo que Adrián persigue es esa ilusión tan humana de retener con la palabra escrita a quienes han desaparecido para siempre, según hicieron los clásicos grecolatinos con sus "consolaciones" o nuestro poeta mayor Jorge Manrique. Pocas emociones como la tristeza tan propicias para sublimarse en Arte. Hay en estas páginas un eco de dolor, que sabe armonizar la emoción afligida de Adrián, por su tristeza de lo finito, con el sereno gozo estético que se ofrece a los lectores.
AUTOR/A
APARICIO FERNÁNDEZ, JUAN PEDRO
Narrador, ensayista y articulista español, nacido en León en 1941. Autor de una fecunda y brillante producción impresa que, siempre dentro del ámbito prosístico, discurre por los senderos genéricos más variados, está considerado, junto a Luis Mateo Díez y José María Merino, como una de las voces narrativas más destacadas del grupo de escritores leoneses -o afincados en León- nacidos alrededor de 1940.<BR><BR>Inclinado, en un principio, hacia el ámbito de las Leyes, cursó estudios superiores de Derecho en las universidades de Oviedo y Madrid, aunque pronto triunfó, sobre su actividad profesional como abogado, su innata vocación literaria. En efecto, a mediados de los años setenta irrumpió en el panorama cultural español con una interesante recopilación de narraciones breves que, publicadas bajo el título de El origen del mono y otros relatos (1975), le revelaron como una de las voces más prometedoras de la joven narrativa hispánica de la época (posteriormente, este volumen de cuentos fue reeditado bajo el título de Cuentos del origen del mono [Barcelona: Destino, 1989]).<BR><BR>Tuvieron que pasar casi tres lustros para que la grata impresión causada por estos relatos entre críticos y lectores se viera refrendada por una nueva entrega literaria del autor leonés, esta vez concebida ya como una narración extensa y publicada, a finales de los años ochenta, bajo el título de Retratos de ambigú (Barcelona: Destino, 1989). Esta excelente novela, reputada muy pronto como una de las mejores de la década, fue galardonada en 1988 con el prestigioso premio Nadal.<BR><BR>A partir de entonces, la trayectoria narrativa de Juan Pedro Aparicio entró en una fase de extraordinaria fecundidad, jalonada por algunos títulos tan relevantes dentro de la novela española actual como El año del francés (Madrid: Alfaguara, 1989), Lo que es del César (Madrid: Alfaguara, 1990) y Los guerreros (Madrid: Compañía Europea de Comunicación e Información, 1991). A mediados de los años noventa, el escritor leonés dio a la imprenta otra espléndida narración, La forma de la noche (Madrid: Alfaguara, 1994), en la que Juan Pedro Aparicio reconstruye con inigualable maestría los duros años de la guerra civil española. Dos años después, publicó una nueva entrega narrativa titulada Malo en Madrid (o el caso de la viuda polaca) (Madrid: Alfaguara, 1996) y en 2001 editó La Gran Bruma (Espasa), novela de intriga sobre el universo del poder y el dinero, situada en la España de finales de los años noventa.<BR><BR>Al tiempo que desarrollaba esta intensa actividad novelesca, Juan Pedro Aparicio comenzó a cultivar la escritura de los libros de viajes, género en el que pronto se convirtió en una de las figuras más descollantes de su tiempo. En colaboración con el ya mencionado José María Merino, dio a la imprenta Los caminos del Esla (León: Everest, 1980), obra a la que siguió, al cabo de diez años, la relación de bello itinerario en tren por el norte de España, presentada bajo el título de El Transcantábrico (Barcelona: Grijalbo Mondadori, 1990).<BR><BR>En su faceta de ensayista, Aparicio Fernández se ha ocupado de rescatar los tesoros naturales y culturales que encierra su tierra natal, reproducidos en el libro Reivindicación leonesa de León (León: Celarayn Editorial, 1980). Además, ha publicado un interesante volumen recopilatorio de sus artículos periodísticos, agrupados bajo el epígrafe de ¡Ah de la vida! (Barcelona: Grijalbo Mondadori, 1991).<BR><BR>En 2005 fue nombrado director del centro del Instituto Cervantes en Londres.<BR><BR>FUENTE: Texto extraído de www.mcnbiografias.com