La memoria está vinculada a los lugares de los hechos, por ello debemos conservar los lugares de la memoria. La historia se vincula más a los sucesos. Así lo afi rma Pierre Nora en ?las leyes de la memoria?.
Durante décadas la represión ejercida por la dictadura de Franco, la guerra y la resistencia se ocultó y se tergiversó. Hubo un gran esfuerzo del Régimen por controlar la memoria histórica prohibiendo la producción histórica.
La historia de hechos traumáticos, marca la identidad de las gentes especialmente de los más jóvenes. La memoria colectiva de un acontecimiento traumático hace que la gente lo intente evitar en las conversaciones sobre todo cuando el silencio se impone por la autoridad de un gobierno, pero el silencio si es impuesto hace que se llegue a recordar aún más, eso sí, en el interior de las casas.
Con la muerte de Franco el 20 de noviembre de 1975 se abrió la posibilidad de investigar los crímenes y desmanes producidos durante la etapa de la dictadura y fue prolífi ca la producción literaria y visual con peliculas y estudios históricos. Durante la transición los políticos democráticos acordaron un pacto de silencio, deciden no echarse encara unos a otros el pasado. Se pretendía asentar la democracia pero con el paso del tiempo se ha convertido en una actitud de desmemoria ofi cial, de amnesia.
La Ley de la Memoria histórica aprobada el 10 de diciembre de 2007 supone el comienzo de la recuperación de la memoria colectiva y declara ilegítimos los juicios celebrados durante el franquismo.
Los textos escritos y aquí reproducidos, son los que pueden ayudar a mantener viva la memoria colectiva. Textos que se hace necesario conozcan los jóvenes y nuevas generaciones, esperando que algun día se incorporen al sistema educativo.
