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Al finalizar el siglo XX, y sobre todo en el que discurre, emergieron movimientos sociales y pueblos indígenas como una opción de cambio en diferentes países de América Latina. Logrando, incluso, acceder a gobiernos de la región, como en el caso de Bolivia. Circunstancia que marca un cambio en los referentes teóricos y prácticos respecto de las transformaciones sociales. A la discusión sobre si ellas se efectuaban a través de reformas o procesos revolucionarios; aparece ahora la referencia al rol de la resistencia para su logro. Uno de los actores que en Colombia y América Latina se ha destacado en los procesos de resistencia de los movimientos sociales son las comunidades indígenas. Sus procesos atraviesan la historia de éste continente desde la invasión española hasta nuestros días. Centrado en el estudio de parte de sus conocimientos y prácticas ancestrales, el libro analiza la resistencia comunitaria en relación con diferentes temas de la filosofía y la ciencia política, y las luchas por la transformación social. De allí se desprenden argumentaciones sobre posibles reconceptualizaciones de la utopía, el poder, la sociedad del buen vivir, el ejercicio de la ciudadanía, la reinvención de los sujetos sociales, el territorio. Todas inscritas en la perspectiva de que otro mundo es posible y de que al aporte epistemológico ayuda a su construcción.
