Begoña trabaja para vivir, aunque eso es solo puro accidente. Lo que ha dado verdadero sentido a su vida ha sido descubrir la magia y el poder de la palabra; y lo más importante que ha hecho en ella, ha sido caminar de la mano de sus hijos y creer en el ser humano.<BR><BR>En su día plantó un árbol y -ahora que ya sabe volar- está en la tarea de conseguir su mayor deseo: no desear.<BR><BR>Begoña nació en 1952, en Villanasur del Río Oca (Burgos), y empezó a escribir poemas y relatos desde el Bachillerato. Entre sus últimas obras publicadas caben señalar sus colaboraciones en diversas antologías: La otra voz. Poesía femenina en La Rioja (1982-2005) (4 de Agosto, 2005); y en las sucesivas ediciones de Voces del Extremo: Poesía y Vida; Poesía y Capitalismo; Poesía y Magia (Fundación Juan Ramón Jiménez, 2006, 2008 y 2009); Voces del Extremo: Poesía y tecnología (Ayuntamiento de Béjar, Salamanca 2009); Aldea Poética IV: SXO (Ópera Prima, 2009); Mujeres en su tinta: Poetas Españolas en el siglo XXI (Universidad Nacional Autónoma de México, 2010) y 50 Poetas Contemporáneos de Castilla-León (Hontanar, 2011).<BR><BR> <BR><BR>Buena parte de su poesía está recogida en sus dos primeras obras: Begoña en ciernes (Colecc. Planeta Clandestino-4 de Agosto, 2006) y La Medida de mi madre (Olifante, 2008). También en revistas como Piedra de Rayo, Youkali, La Hamaca de Lona, Viento Sur y Fábula.<BR><BR> <BR><BR>Siempre que solicitan su presencia, Begoña acude para leer y explicar su poesía, ya sea en los foros más cercanos o como ponente en el Curso de Verano de la Universidad de La Rioja en 2010, referido a las ?Habilidades comunicativas orales: Teorías y prácticas innovadoras para escuchar y hablar?, o cautivando como en el otoño de 2011, a las alumnas de dicha Universidad y futuras maestras de Educación Infantil, porque como ella misma les explicaba a través de sus versos:<BR><BR>si me hubieran leído poemas<BR><BR>desde niña?<BR><BR>nunca hubiera dejado de ser niña?<BR><BR>Editorial Olifante