Francisco Serrano (Guareña, 1982) es extremeño y sentimental y solo sabe de monstruos y naves espaciales. Es autor de las novelas En la costa desaparecida (Episkaia, 2020) y Perros del desierto (Editorial Alegoría, 2013), ha participado en los cuatro primeros números de las monografías de ficción Prosa Inmortal y forma parte de volúmenes de relatos como Hijos de Sedna (Prosa Inmortal y Episkaia, 2016) y Estío. Once relatos de ficción climática (Episkaia, 2018). Por lo demás, con frecuencia olvida peinarse.