Para envío
Traspaso rápidamente el arco detector de metales del edificio de los Juzgados. El vigilante de la puerta me mira con gesto bovino mientras mi maletín de cuero se arrastra lentamente por el rodillo de la máquina de rayos X.
Estoy mojado por la lluvia y con los músculos un tanto ateridos por el frío de este invierno gris y plomizo de finales del siglo XX, y mis gafas pasan un instante emborronadas por el vaho producto del cambio de temperatura.
Me muevo con rapidez por el pasillo atestado de los Juzgados. Los rostros de las personas sentadas en los pequeños bancos laterales se giran para verme, mirándome con la mezcla feroz de ansiedad y esperanza de quienes están esperando a su abogado.........|
6TE|27611|1|1|Traspaso rápidamente el arco detector de metales del edificio de los Juzgados. El vigilante de la puerta me mira con gesto bovino mientras mi maletín de cuero se arrastra lentamente por el rodillo de la máquina de rayos X.
Estoy mojado por la lluvia y con los músculos un tanto ateridos por el frío de este invierno gris y plomizo de finales del siglo XX, y mis gafas pasan un instante emborronadas por el vaho producto del cambio de temperatura.
Me muevo con rapidez por el pasillo atestado de los Juzgados. Los rostros de las personas sentadas en los pequeños bancos laterales se giran para verme, mirándome con la mezcla feroz de ansiedad y esperanza de quienes están esperando a su abogado.........