Para envío
?Anarquismo y sexualidad? de Helena Andrés Granel es un breve acercamiento a la historia del anarquismo en el primer tercio del siglo XX para mostrarnos la visión que el movimiento anarquista tuvo del amor y la sexualidad. Trabajo riguroso y, al mismo tiempo, claro que hace un lustro vio la luz en la Revista Germinal y que ahora recuperamos ante la escasez de trabajos que se pueden encontrar sobre este tema en las librerías y bibliotecas:
Como construcción sociocultural e histórica, la sexualidad no se encuentra aislada del ámbito político, sino que constituye en sí misma una cuestión política, siendo el sistema sexual parte esencial del sistema social. Desde esta perspectiva es especialmente interesante el análisis del discurso anarquista con respecto a la sexualidad. Esto es así por dos razones fundamentalmente: en primer lugar, el anarquismo conectó abiertamente las esferas política y sexual, al considerar que el proceso de cambio social debía darse de forma paralela en el ámbito personal y en el político; en segundo lugar, en consecuencia puso en circulación discursos alternativos y contrahegemónicos con respecto a los discursos dominantes sobre la sexualidad, de forma coherente con su concepción de lo que debía ser una organización social antiautoritaria.