Para envío
Amigo lector, no se ha equivocado de colección, ni está leyendo mal la portada.
Ocurre que como en el refrán antiguo español "el pez grande se come al chico", algo parecido es lo que nos ha acontecido a la Asociación "MEMORIA VIVA".
Resulta que algunas grandes organizaciones, con el dinero que los contribuyentes pagamos a Hacienda y ellas reciben, registran nombres de colecciones que luego n¡ siquiera desarrollan pero que les pertenecen, y así resulta que una de estas organizaciones inscribió como suya la cabecera "Colección Memoria Viva", de manera que al querer nosotros preservar nuestra colección de divulgación del exilio y la deportación, nos hemos encontrado con que podemos tener problemas legales por manejar un nombre que ellos no utilizan pero que han registrado como propio.
Como nuestro objetivo únicamente es difundir entre los interesados los lugares por los que tuvieron que pasar nuestros compatriotas tras la "Retirada" a Francia y el fin de nuestra guerra incivil con el consiguiente dolor y sufrimiento, y no entrar en cuestiones legales que ni entendemos ni estamos preparados para ello, hemos opiado por seguir la misma táctica y registrar un nombre que aglutine los escritos presentes y futuros. No hemos querido comenzar la numeración nuevamente porque consideramos que el trabajo realizado en estos siete últimos años está íntimamente ligado a esta continuación. Así el número actual es el 7 que se correspondería con la anterior colección si no hubiésemos tenido que suspenderla.
Hoy les proponemos conocer la historia de tres enclaves concentracionarios franceses que no son de los más conocidos, Bram, Montolieu y Couiza-Montazels, pero que pesar de su corta vida fueron receptores de miles de nuestros compatriotas entre los que, como podrá leer, había personajes relevantes por su trayectoria personal aunque en el exilio todos nuestros compatriotas sufrieron el mismo desamparo. El trabajo de nuestro colaborador y amigo, Adrián Blas Mínguez Anaya, nos ilustran con la investigación realizada sobre estos desconocidos campos.
Esperamos, amigo lector, que el interés manifestado en la etapa anterior nos lo siga otorgando en la presente. Muchas gracias por su fidelidad.
Juan Gallego Sanz Presidente de MEMORIA VIVA.