Por primera vez, un sociólogo pone sobre la mesa todas sus cartas. El autor de este libro destripa, a la vista de todos, las jugadas que le han convertido en sociólogo y los juegos que puede jugar como sociólogo. Construye, además, un paradigma complejo de la investigación social, que integra: verticalmente, los niveles tecnológico (cómo se hace), metodológico (por qué se hace así) y epistemológico (para qué y para quién se hace); horizontalmente, las perspectivas distributiva (cuyo modelo es la encuesta estadística), estructural (cuyo modelo es el grupo de discusión) y dialéctica (cuyo modelo es el socioanálisis).
La construcción está atravesada por un hilo rojo: la transformación del investigador de algoritmo (el investigador desaparece detrás de sus procedimientos) en sujeto (el investigador es integrado en el proceso de investigación como sujeto en proceso). Sólo un sujeto humano -?sujeto dividido en pos de un objeto perdido?- puede preguntar por la verdad del orden social: pregunta sin respuesta, pues la prueba empírica -según Heisenberg- y la prueba teórica -según Gödel- son imposibles porque son paradójicas.
Hace años, Jesús Ibáñez nos mostraba el camino hacia más allá de la Sociología. Para investigar la sociedad hay que situarse más allá de la sociología: las técnicas de investigación social no articulan ni pueden articular con una teoría sociológica -el orden social se desintegraría si fuéramos conscientes de él-, sino directamente con la ideología: así, la encuesta estadística articula con la ideología grupalista del capitalismo de producción, y el grupo de discusión articula con la ideología grupalista del capitalismo de consumo. Ahora intenta hablarnos desde ese lugar imposible, desde más allá de la sociología.
Jesús Ibáñez es catedrático de ?Métodos y Técnicas de Investigación Social? en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid. A lo largo de su vida ha tratado de conjugar sus puntos de vista como actor y como espectador en la vida española. Este libro -presentado como memoria en las oposiciones en las que accedió a la cátedra- es una vuelta de tornillo más en su reflexión crítica sobre la sociología.
DEL ALGORITMO AL SUJETO
AUTOR/A
IBAÑEZ ALONSO, JESÚS
Jesús Ibáñez fue el único hijo de una madre soltera, propietaria de un pequeño comercio y de algunas vacas en la aldea de San Pedro del Romeral, en el Valle del Pas (Cantabria). Muy pronto le interesó la filosofía y decidió estudiar Ciencias Políticas trasladándose a Madrid.<BR>En la facultad de Ciencias Políticas y Económicas de la Universidad de Madrid, más tarde Universidad Complutense de Madrid, entró en contacto con disidentes que se convertirían en figuras importantes del pensamiento español, como Alfonso Sastre o Ignacio Aldecoa. Durante las detenciones de estudiantes e intelectuales de 1956, Ibáñez y otros tres estudiantes redactaron un escrito de solidaridad. Los cuatro fueron juzgados e Ibáñez fue condenado a seis años de cárcel, aunque finalmente sólo cumplió seis meses.<BR>Su encarcelamiento provocó su expulsión de las instituciones académicas con las que colaboraba: el Instituto de la Opinión Pública, la Escuela de Periodismo y la Universidad Complutense. Cuando salió de la cárcel, Ibáñez se encontró sin trabajo ni posibilidad de encontrarlo y fundó el Instituto de Investigaciones de Mercado ECO.<BR>A finales de los años sesenta participó en la fundación de la Escuela Crítica de Ciencias Sociales de CEISA de Madrid, un marco docente libre, que fue clausurado en sucesivas ocasiones por la policía franquista. En 1974 Ibáñez se reincoporó a la Universidad Complutense gracias al apoyo de, entre otros, Salustiano del Campo. En 1982 logró la cátedra de Métodos y Técnicas de Investigación Social de esa misma universidad.