En Invierno reunimos, compilados por Peter Saint-André, fragmentos de distintas fuentes (principalmente de sus diarios), en los que Henry David Thoreau reflexiona, entre diciembre y febrero, sobre los efectos del invierno en las vidas de las personas.
Vean estos árboles, tan desnudos o crujientes con sus hojas marrones marchitas, excepto las perennifolias, sus capullos latentes al pie de los pecíolos. Vean los campos, rojizos y marchitos, y los varios setos y malezas con culmos secos y descoloridos. Tal es nuestra relación con la naturaleza en este momento; tales las plantas que somos. No tenemos más savia ni verdor ni color ahora. Pero aun en invierno mantenemos una alegría moderada y una vida interior serena, no nos falta calidez y melodía.
INVIERNO
AUTOR/A
THOREAU, HENRY DAVID
Henry David Thoreau (Massachusetts, 1817-1862) fue agrimensor, naturalista, conferenciante y fabricante de lápices, además de ensayista y uno de los padres fundadores de la literatura estadounidense. Disidente nato, tan completamente convencido de la bondad de la naturaleza como para proclamar un «pensamiento salvaje», se le considera también un pionero de la ecología y de la ética ambientalista. Sin embargo, su auténtico empleo fue, según se ocupó de recordar, «inspector de ventiscas y diluvios». Thoreau quiso experimentar la vida en la naturaleza, por lo que el 4 de julio de 1845, Día de la Independencia, se fue a vivir durante dos años a los bosques cercanos a Walden Pond. Abandonó la cabaña que él mismo construyó en septiembre de 1847 para volver a vivir con su familia. Su obra Walden, que relata su vida en los bosques, fue publicada en 1854. Años antes, en 1846, Thoreau se negó a pagar impuestos debido a su oposición a la guerra contra México y a la esclavitud en Estados Unidos, por lo que fue encarcelado. De este hecho nace su ensayo La desobediencia civil, pionero en sus propuestas relativas a la insurrección frente al Estado y la no violencia.