La Eskalera Karakola empezó hace casi 20 años con la okupación de una antigua fábrica de pan de la calle Embajadores en el barrio de Lavapiés en Madrid. Allí se convirtió en una de las primeras experiencias como casa okupada autogestionada de mujeres y uno de los centros de la actividad feminista madrileña. Como tal, también ha participado durante estos años a repensar el feminismo desde nuevos lugares, con miradas no esencialistas y cuestionando el pensamiento eurocentrista.
Después de 9 años de vida en ese antiguo edificio y tras años de lucha defendiendo nuestra continuidad en el barrio, en 2005 la administración nos alquiló dos locales para nuestro uso y autogestión. Esos locales se sitúan a unas manzanas de la antigua casa. Cuando entramos, los espacios eran completamente diáfanos y todo estaba por hacer, lo elemental (como agua, luz, paredes, suelo, baño...) pero también lo que soñábamos para ese nuevo espacio, como montar un estudio de radio. Decidimos hacerlo todo con nuestras manos, aprendiendo en un proceso apasionante y agradecido pero también muy lento y costoso. Acondicionamos el primer local como espacio de trabajo, sala de reunión y estudio de radio. En el segundo local, pensado como espacio para actividades públicas y talleres de todo tipo, sólo nos llegó el dinero, el tiempo y las fuerzas para hacer lo imprescindible, es decir hacer del local un espacio habitable con agua y luz, paredes y baño. Los dos locales fueron acondicionados para ser totalmente accesibles a personas con diversidad funcional, no por cumplir con ninguna normativa, sino porque la Eskalera Karakola, como espacio público, politico (y también intimo), es habitada en su cotidiano por cuerpos diversos.
Ahora, casi 10 años después, la administración nos pide que llevemos a cabo obras de mejora para cumplir la normativa y poder seguir realizando actividades públicas. Eso significa acondicionar e insonorizar el local B, lo que permitirá disfrutar del espacio sin molestar a las y los vecinos que viven encima.
Características básicas
La administración nos pide que llevemos a cabo obras de mejora para cumplir con la normativa y poder seguir realizando actividades públicas. Estamos en un edificio construido recientemente por la EMV, nos cedieron el local en su estado bruto. Ahora tenemos que llevar a cabo diferentes reformas para poder seguir con las actividades:
- Insonorización y aislamiento térmico del local
- Cambiar la puerta de entrada para garantizar la insonorización
- Aislamiento y acondicionamiento del baño para el acceso de personas con diversidad funcional
Motivación y a quién va dirigido el proyecto
La Eskalera Karakola es un espacio singular e imprescindible que acoge a númerosos colectivos, grupos, reuniones, actividades, fiestas, enmarcadas en los feminismos y transfeminismos y en nuevas apuestas políticas. Además es un espacio accesible a personas con diversidad funcional. Por ello es uno de los pocos espacios del centro de Madrid habitado por cuerpos diversos, tanto por como se ha ido pensando el espacio físico como por su apuesta política de transformar el mundo desde la multiplicidad, la diversidad.
La Eskalera Karakola no recibe fondos, ni subvención alguna. Siempre se ha mantenido desde la autogestión con la aportación de las personas y grupos que la habitan, así como de las cuotas de las socias, que han sido una fuente de ingreso importante para el proyecto. Pero ahora necesitamos una cantidad de dinero que no podemos conseguir por esas vías. Por ello, pedimos a las personas que apoyan y valoran la existencia de la Eskalera Karakola que participen aportando a esta campaña.
Este proyecto va dirigido:
-A las personas que piensan que tiene que seguir existiendo un espacio autogestionado y autónomo feminista y transfeminista en el centro de Madrid.
-A personas que piensan que tienen que existir espacios donde la diversidad (sexual, funcional, de género...) sea uno de los elementos centrales de transformación social. Es decir un espacio que esté acondicionado para ser accesible para todxs, pero también donde esté promovido y defendido el respeto a todos los cuerpos y a todas las identidades.
-A personas que valoran la existencia de grupos de consumo autogestionado, relaciones directas entre consumidores y productores y que quieren generar otra relación tanto con el campo como con la ciudad.
Objetivos de la campaña de crowdfunding
El objetivo es conseguir hacer las reformas necesarias que nos exige el ayuntamiento y dejar el local de la Eskalera Karakola en concidiciones para acoger a todo tipo de actividades en un ambiente calido y accesible a todxs y con la libertad de saber que no se molesta a lxs vecinxs.
El objetivo básico es conseguir inicialmente los 10.682€ que permitan el aislamiento acústico e insonorización del local.
Si conseguimos el óptimo de 16.851€, además de lo anterior, podremos poner una nueva puerta semiacústica, acondicionar y aislar el baño para que sea también accesible para todas y aislar las ventanas y dejar el local totalmente acabado.